Nota de prensa
HIPOTECAS12/01/2006
ADICAE considera que las nuevas ofertas hipotecarias no suponen beneficios para el consumidor
-Las hipotecas hasta 50 años multiplican el coste para las familias y amplían la exposición a coyunturas económicas y personales desfavorables
-Realizar más VPO, flexibilizar los requisitos de las ayudas públicas, aumentar la desgravación fiscal a los jóvenes o fomentar el leasing en vivienda, medidas más eficientes y menos costosas para las familias.
La Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros ADICAE(www.adicae.net)estima que las nuevas ofertas hipotecarias que se están vendiendo a 40 años, incluso hasta 50, no suponen ningún beneficio adicional para el consumidor. Esta nueva modalidad hipotecaria vaticina un incremento en el riesgo de las familias a la hora de encontrarse con momentos de recesión económica o circunstancias personales desfavorables (paro, enfermedad…) a más largo plazo.
A modo de ejemplo, con una hipoteca de 150.000 euros a 25 años la cuota mensual se situaría en 711 euros con los actuales tipos y al vencimiento de este préstamo se habrían pagado de intereses, aproximadamente, 63.000 euros. Sin embargo, si esta misma deuda se ampliase a un periodo de 40 años nos encontraríamos con una mensualidad de 532 euros que, aunque más cómodo en el presente, a su vencimiento nos habrá hecho pagar 107.000 euros de intereses (un 70% más de coste), mientras que si fuese a 50 años la cuota mensual saldría a 483 euros y el montante final de intereses se dispararía a 139.000 euros (casi otra vivienda y más del doble que si se hiciese a 25 años). Además, como se ve en el ejemplo, incrementar 10 años más el plazo tan sólo nos supondría un ahorro mensual de 49 euros mientras que, al vencimiento, pagaríamos 32.000 euros de más.
Por otro lado, nos encontramos también que a mayor plazo de devolución más tardamos en amortizar el capital prestado y mayores son los intereses devengados, de manera que podemos estar años atendiendo cuotas y sólo haber pagado prácticamente intereses. Ante posibles insolvencias futuras por paro, enfermedad, separación matrimonial o fallecimiento, la deuda apenas habría menguado. A modo ilustrativo, tras estar pagando durante 15 años las cuotas del préstamo hipotecario, si el vencimiento de éste es a 25 años nos quedaría de devolución del capital alrededor de 74.000 euros (la mitad de lo solicitado), mientras que si el vencimiento es a 40 o 50 años el capital pendiente de amortizar tras 15 años de pagos, todavía alcanzaría los 113.000 euros y 125.500, respectivamente.
CUADRO EXPLICATIVO DE LOS DATOS HIPOTECAS A 50 AÑOS
HIPOTECA 150.000 € | 25 AÑOS | 40 AÑOS | 50 AÑOS |
Cuota Mensual | 711 € | 532 € | 438 € |
Intereses Pagados | 63.000 € | 107.000 € | 139.000 € |
Capital pendiente a los 15 años | 74.000 € | 113.000 € | 125.500 € |
Porcentaje pdte. | 49% | 75,33% | 83,66% |
A pesar de que desde diversos sectores se ha idealizado que estas ofertas facilitan el acceso a la vivienda a los jóvenes y que son una muestra de la gran eficiencia del sistema financiero español al equipararlo con las ofertas de Japón o de Estados Unidos, ADICAE considera que existen otras medidas más eficientes y menos costosas para el consumidor que el ampliar los periodos de amortización: incrementar la construcción y finalización de vivienda protegida, ya que algunas edificaciones parecen interminables; así como flexibilizar los requisitos para la obtención de ayudas públicas, especialmente para los menores de 35 años, suponen acciones concretas y más eficaces.
Para la asociación de consumidores ADICAE también existen otras medidas que podrían facilitar el acceso a la vivienda, como trasladar el leasing que actualmente existe en el ámbito empresarial a los consumidores, una iniciativa que relajaría además del precio de los alquileres, el grado de endeudamiento de las familias. Según esta propuesta, se crearían viviendas de alquiler con opción de compra donde parte del dinero que el arrendatario paga iría destinado a una “hucha”. Al cabo de un número determinado de años, el consumidor podría comprar esa misma vivienda donde ha estado de alquiler a un precio rebajado ya que esa “hucha” rebajaría su precio. Otras acciones como aumentar el porcentaje de desgravación fiscal por adquisición de vivienda para los menores de 35 años (colectivo que destina el 55% de su renta al pago de cuotas hipotecarias y que tiene los salarios más bajos) y aligerar los plazos de desahucio de los arrendatarios que no pagan o causan destrozos en las viviendas de alquiler, supondrían serios avances para lograr una solución no sólo a la escalada de precios de la vivienda, sino también para evitar que el nivel de endeudamiento de las familias sea tan elevado.
Ante el reciente encarecimiento del precio del dinero que ha supuesto una repercusión moderada sobre las economías domésticas, ADICAE quiere advertir que las previsibles próximas alzas de los tipos de interés en Europa podrían ocasionar graves perjuicios a las familias españolas pudiendo conllevar graves situaciones de sobreendeudamiento. Aunque el impacto de las subidas del euribor pueden ser asumidas en un principio por las familias españolas, a pesar de que supongan un punto más a la hora de apretarse el cinturón, confirman las previsiones de ADICAE de que nos encontramos ante el final del periodo del precio del dinero más bajo de la historia en España, lo que supondrá nuevas subidas y apretarse aún más el cinturón hasta extremos insoportables por las economía de los consumidores. Por todo ello desde ADICAE consideramos necesario que esta predisposición al alza se vea acompañada de medidas de prevención, por lo que desde esta Asociación de Consumidores se exige la puesta en marcha de la Ley de Sobreendeudamiento de las Familias anunciada por la ministra de Sanidad y Consumo, Elena Salgado, durante su primera comparecencia en el Congreso de los Diputados y en cumplimiento del programa de gobierno del PSOE. La aprobación de esta medida legislativa paliaría situaciones graves para la economía española y evitaría que millones de familias caigan en el sobreendeudamiento y se vean abocadas a tener graves dificultades para pagar las hipotecas de sus viviendas y los créditos al consumo solicitados para poder llegar a fin de mes.